martes, 11 de enero de 2022

Van Lommel reta a la medicina oficial: "La conciencia no está en el cerebro. Sobrevive a la muerte"

 

Pim van Lommel

Ir a la navegación Ir a la búsqueda
Pim van Lommel
Pim van Lommel-1 (cropped).jpg
Pim van Lommel tras un discurso en Ulm el 22 de febrero de 2012.
Información personal
Nacimiento 15 de marzo de 1943
Laren, Países Bajos
Nacionalidad Neerlandesa
Lengua materna Neerlandés Ver y modificar los datos en Wikidata
Educación
Educado en Universidad de Utrecht Ver y modificar los datos en Wikidata
Información profesional
Área Cardiología,
experiencia cercana a la muerte
Empleador Hospital Rijnstate-Krankenhaus en Arnhem
Web
Sitio web

Willem (Pim) van Lommel o Pim van Lommel (15 de marzo de 1943, Laren, Países Bajos) es un cardiólogo y científico holandés.

Biografía

Tras aprobar el liceo (Gymnasium) en Hilversum van Lommel cumplió con su servicio militar desde 1961 hasta 1963. Luego estudió medicina hasta 1971 en la Universidad de Utrecht, Países Bajos. Desde 1971 y hasta 1976 se desempeñó como médico en el Hospital Antonius en Utrecht, donde hizo sus estudios de la especialidad, convirtiéndose en cardiólogo. A partir de 1977 y hasta el año 2003 trabajó como cardiólogo en el Hospital Rijnstate-Krankenhaus en Arnhem, permaneciendo en esta función durante 26 años. A partir de 2003, Pim van Lommel ha trabajado principalmente en el área de la investigación de las experiencias cercanas a la muerte y los temas científicos aledaños o afines.

Obra

Es mejor conocido por su trabajo científico sobre las experiencias cercanas a la muerte y la conciencia, incluyendo el famoso estudio prospectivo publicado en la revista médica The Lancet.1

Es también el autor del best seller holandés de 2007 titulado Eindeloos Bewustzijn: een wetenschappelijke visie op de Bijna-Dood Ervaring2​ (Consciencia sin fin: una aproximación científica a la experiencia cercana a la muerte), que ha sido traducido al alemán, inglés, francés y castellano (traducción al castellano: Consciencia más allá de la vida. La ciencia de la experiencia cercana a la muerte. Ediciones Atalanta, 2012).

  • Le avalan más de 30 años estudiando las experiencias cercanas a las muerte (ECM)
  • Van Lommel cuestiona en "Consciencias más allá de la vida" la eutanasia y la extracción de órganos en personas con muerte cerebral

Por
6 min.

El libro “Vida después de la Vida” supuso en 1975 un auténtico tsunami. Su autor, Raymond Moody, introdujo por primera vez la expresión “experiencias cercanas a la muerte “ (ECM), que el cine ha popularizado en películas como "Más allá de la vida” (2010), dirigida por Clint Eastwood o  la francesa “Premonición”( Afterwards) (2008) protagonizada por John Malkovich, que es la que más se aproxima a las teorías de Van Lommel.

La clase médica oficial calificó los relatos de las ECM de meras alucinaciones provocadas por por la ausencia de oxígeno en el cerebro(anoxia) y la liberación de las endorfinas, un opiáceo natural que sirve para contrarrestar situaciones de estrés como una parada cardiorespiratoria.Van Lommel no creyó en esa explicación oficial. En 1981 publicó en la revista Lancet  una primera investigación sobre las experiencias de pacientes que habían sufrido una ECM tras superar una  parada cardiorespiratoria con muerte cerebral. Más de treinta años después, dedicados al estudio de los ECM, se  publica en España “Consciencia más allá de la vida”., escrito por este cardiólogo holandés. No te deja indiferente.

La última frontera

Van Lommel nos ofrece un dato desconcertante. Sólo un 18% de los pacientes con encefalograma plano sufren una ECM. No son meras alucinaciones. Ni intervienen las endorfinas. El regreso siempre es abrupto y doloroso.Hay más. No se pierde la identidad propia. Además ven y escuchan todo lo que ocurre a su alrededor, pese estar en otro estado, sin tiempo ni espacio.“Sentí –asegura una paciente- que me iba deslizando hacia las profundidades de otro estado de conciencia. Por decirlo de algún modo, mi conciencia  viajaba mientras mi cuerpo permanecía inmóvil sobre la cama. Podía ver mi cuerpo, no sentirlo”.

Los que experimentan una ECM constatan la existencia de una última frontera; más allá de la cual llegaba la muerte, el viaje sin retorno. Así lo experimentó un joven, completamente sordo, que casi se ahoga a los diez años.
“Entonces alcancé la frontera. A pesar de tener diez años, no necesité más explicaciones. Sencillamente comprendí que nunca podría volver si cruzaba aquel límite. Pero alguno de mis antepasados estaban al otro lado, llamando mi atención, porque se comunicaban conmigo mediante una especie de telepatía.”

¿Dónde está esa frontera entre la vida y la muerte?, nos preguntamos con Van Lommel. Hasta ahora se distinguía la llamada muerte clínica (cese de la respiración y de la actividad cardíaca) de la muerte biológica, en la cual el cerebro pierde las funciones de forma irreversible sin posibilidad de reanimación. Van Lommel pide revisar estos conceptos admitidos por la medicina oficial.

Los regresados

Estas experiencias cercanas a la muerte se producían en el pasado. El psicoanalista Gustav Jung sufrió una ECM. Son experiencias que han aumentado con los avances médicos de resucitación. Las ECM no dependen de factores como la religión, la raza, el sexo o a cultura. Los niños también sufren las ECM. “Cuanto tenía cinco años  contraje meningitis y entré en coma. `Morí´ y fui arrastrado hacia un vacío oscuro y seguro en el que no sentía miedo ni dolor. Me sentía en casa, en aquel lugar…Vi una niña pequeña de unos díez años. Noté que me reconocía. Nos abrazamos y me dijo:”Soy tu hermana. Morí un mes antes de que tú nacieras….Mis padres quedaron tan impactados que les entró el pánico(…)Me confirmaron que, en efecto, habían perdido a una hija llamada Riertje. Habían decidido no decírnoslo ni a mi ni a mi hermano hasta que fuéramos lo suficiente mayores para entender  el significado de la vida y la muerte”

 Además de estos encuentros los regresados se ven rodeados por una luz inexplicable tras un largo túnel. Experimentan también un cambio de percepción, especialmente sorprendente en personas sin visión.”Lo siguiente que recuerdo es que estaba en el Centro Médico Harborview, contemplando todo lo que sucedía allí abajo. Y era terrorífico, dado que no estoy acostumbrada a ver las cosas de forma visual, ¡porque nunca antes lo había hecho! ¡Y al comienzo era algo espeluznante!  Y entonces por fín reconocí mi anillo de boda y mi pelo. Y pensé: “¿Eso de ahí abajo es mi cuerpo? ¿Estoy muerta o qué? Ellos(los médicos) no paraban de repetir:¡No podemos traerla de vuelta!...”

No todas las ECM son tan gratificantes. Un porcentaje pequeño, entre un 1% o un 2%, de los regresados tiene una ECM aterradora que les deja un recuerdo perenne durante toda su vida. Y esto mismo ocurre en todas las ECM

El síndrome del regreso

Las ECM están más extendidas de lo que se creen. Según  Van Lommel  unas 600.000 personas en los Países Bajos, 2 millones en el Reino Unido y más de 9 millones en EEUU han tenido una ECM. Los regresados inician, después de una ECM, una búsqueda silenciosa para entender su experiencia. “Cuando regresé de aquel mundo maravilloso, de aquella experiencia fascinante, el recibimiento que se me dió aquí, en este mundo, fue frío, gélido, y sobre todo desprovisto de amor”, aseguró una mujer que sufrió una ECM tras graves complicaciones en el parto.

Van Lommel describe un auténtico síndrome del regreso. Las posibilidades de divorcio aumentan al no aceptar la pareja los relatos de una ECM. En los jóvenes pueden buscarse vías de escape como las drogas o el alcoholismo. Sólo la aceptación de esta experiencia –afirma Van Lommel- puede tener efectos positivos, pero desgraciadamente los médicos no están preparados para afrontar estas pacientes con síntomas tan desconcertantes. Ni siquiera en la Iglesia encuentran respuestas.
Los regresados experimentan otros cambios  No tienen miedo a la muerte, son más altruistas y, sobre todo, más espirituales. Tienen que aprender también nuevas sensaciones tras una ECM como una intuición agudizada, clarividencia, ver las emociones y sentimienos de los demás, y lo más sorpendente, su cuerpo puede emitir un campo electromagnético que rompe cualquier aparato eléctrico con un simple roce. También ven el aura de las personas como comprobamos en “Premonición”( Afterwards).

La conciencia no está en el cerebro

Van Lommel  no es creyente. No cree en la trascendencia, pero rechaza, tal como se enseña hoy, que la conciencia sea producto o efecto de la función cerebral. Este heterodoxo holandés habla de la muerte como un cambio de conciencia. La muerte supone entrar en lo que él llama un conciencia no local, sin tiempo ni espacio. Plantea una especie de inmanentismo metafísico. La idea de Dios se ha sustitudo en Van Lommel en por una conciencia humana colectiva o universal que conecta a cada individuo con todo cuanto existe , ha existido o existirá. Y argumenta esta explicación, acudiendo a la Física cuántica.

 Platea también que el cordón umbilical que nos une con esa conciencia no local es el ADN, que  –afirma Van Lommel- permite explicar la continuidad de nuestro cuerpo siempre cambiante. Este cardiólogo llega a una conclusión que parece ciencia ficción: la memoria trasplantada  en las donaciones de órganos. "En ocasiones- afirma- el ADN del órgano trasplantado continúa funcionando como zona de resonancia o interfaz de la conciencia del donante, permitiendo al receptor del órgano sentir retazos de sentiemientos e ideas que apuntan a la personalidad y a la conciencia del donante fallecido". Estremecedor.

¿Cuándo empieza la muerte?

Las ECM  rompen los viejos prejuicios sobre la muerte. Es la propuesta de este médico contracorriente que cuestiona la extracción de órganos en donantes cerebralmente muertos. ¿Equivale la muerte cerebral a la muerte?, se pregunta este cardiólogo holandés, que nos revela un dato estremecedor. "La mayoría de la gente ignora que la extracción de órganos de un paciente `muerto´ a menudo requiere la administración de anestesia general, a causa del llamado síndrome de Lázaro: reflejos violentos del donante cuya muerte se ha certificado".

También  cuestiona la eutanasia (legal en Holanda desde 2001).  “Podría cambiar la actitud de los pacientes, su deseo de solicitar la eutanasia o un suicidio asistido, si se dieran cuenta de que la conciencia sobrevive a la muerte porque no tiene principio ni fin”.
A Pim Van Lommel no es fácil callarle. Es un científico atípico dispuesto a intervenir en programas de TV y a ser entrevistado en prensa y también en televisión. También tiene su propia web, donde recibe cartas como éstas de personas que han sufrido una ECM

En cualquier caso, para mí, personalmente esta experiencia ha sido decisiva para convencerme de que la conciencia perdura más alla´de la tumba. Lo muerto ha resultado no estarlo, sino ser otra forma de vida”

 

 

Un científico norteamericano afirma que no existe la muerte

 "La idea de morir es algo que siempre se nos ha enseñado a aceptar, pero en realidad solo existe en nuestras mentes", argumenta Robert Lanza

Una luz al final de un túnel

Una luz al final de un túnel

 El investigador norteamericano Robert Lanza afirma que tiene pruebas definitivas para confirmar que la vida después de la muerte existe y que de hecho la muerte, por sí misma, no existe de la manera en la que la percibimos.

Lanza argumenta que la respuesta a la pregunta "¿Qué hay más allá de la muerte?", cuestión sobre la cual los filósofos llevan siglos reflexionando, radica en la física cuántica, y en concreto en la nueva teoría del biocentrismo.

Según este investigador norteamericano, de la Escuela de Medicina de la Universidad Wake Forest, de Carolina del Norte, la solución a esa cuestión eterna consiste en la idea de que el concepto de la muerte es un mero producto de nuestra conciencia, según relata la edición digital de The Independent .

Lanza afirma que el biocentrismo explica que el universo solo existe debido a la conciencia de un individuo sobre él mismo. Lo mismo sucede con los conceptos de espacio y tiempo, que este ciéntifico explica como "meros instrumentos de la mente".

En un mensaje publicado en su sitio web, Lanza argumenta que con esta teoría el concepto de la muerte como la conocemos "no existe en ningún sentido real", ya que no hay verdaderos límites según los cuales se pueda definir.

"Esencialmente, la idea de morir es algo que siempre se nos ha enseñado a aceptar, pero en realidad solo existe en nuestras mentes", opina Lanza. Asimismo, evidentemente, creemos en la muerte porque nos asociamos con nuestro cuerpo y sabemos que los cuerpos físicos mueren.

Lanza señala que el biocentrismo es similar a la idea de universos paralelos, la hipótesis formulada por físicos teóricos según la cual hay un número infinito de universos y todo lo que podría suceder ocurre en alguno de ellos.

En términos de cómo afecta ese concepto a la vida después de la muerte, el investigador explica que, cuando morimos, nuestra vida se convierte en una "flor perenne que vuelve a florecer en el multiverso" y agrega que "la vida es una aventura que trasciende nuestra forma lineal ordinaria de pensar; cuando morimos, no lo hacemos según una matriz aleatoria, sino según la matriz ineludible de la vida".

¿Quién es Robert Lanza?

Robert Lanza es considerado uno de los principales científicos del mundo. En la actualidad es el responsable científico de Advanced Cell Technology y profesor adjunto en la Wake Forest University School de Medicina. Tiene cientos de publicaciones e invenciones, y más de 30 libros científicos: entre ellos, "Principios de Ingeniería de Tejidos", que es reconocida como la referencia definitiva en el campo. Otros incluyen One World: La Salud y la supervivencia de la especie humana en el siglo 21 (Prólogo por el ex presidente y Premio Nobel Jimmy Carter), y el "Manual de Células Madre" y "Fundamentos de Biología de Células Madre", que se consideran referencias definitivas en la investigación de células madre.


 

El Dr. Lanza recibió su licenciatura y grado MD de la Universidad de Pennsylvania, también fue becario Fulbright, y fue parte del equipo que clonó el primer embrión humano en el mundo, así como el primero en generar con éxito células madre de adultos usando la transferencia nuclear de células somáticas (clonación terapéutica). El trabajo del Dr. Lanza ha sido crucial para nuestra comprensión y la transferencia nuclear de biología de células madre. En 2001 también fue el primero en clonar una especie en peligro de extinción (un Gaur), y en 2003, se clona un buey salvaje en peligro de extinción (un Banteng) a partir de las células de la piel congeladas de un animal que había muerto en el zoológico de San Diego cerca de un cuarto de siglo antes.

El Dr. Lanza y sus investigaciones han aparecido en casi todos los medio de comunicación en el mundo, incluyendo CNN, Time, Newsweek, People, así como las portadas de The New York Times, Wall Street Journal, Washington Post, entre otros. Lanza ha trabajado con algunos de los más grandes pensadores de nuestro tiempo, incluyendo los premios Nobel Gerald Edelman y Rodney Porter, el reconocido psicólogo de Harvard Dr. Skinner (el "padre del conductismo moderno"), Jonas Salk (descubridor de la vacuna contra la polio) y el pionero en trasplante de corazón Christiaan Barnard. Su investigación actual y el trabajo de Advanced Cell Technology se centra en las células madre, la medicina regenerativa y su potencial para proporcionar terapias para algunas de las condiciones más mortales y debilitantes del mundo.

En 2007, Lanza publicó un artículo, "Una Nueva Teoría del Universo" en The American Scholar, una revista líder intelectual que ha publicado con anterioridad trabajos de Albert Einstein, Margaret Mead y Carl Sagan, entre otros. Su teoría coloca la biología por encima de las otras ciencias, en un intento de resolver uno de los mayores enigmas de la naturaleza, la teoría del todo lo que otras disciplinas se han llevado a cabo durante el último siglo. Esta nueva visión se ha conocido como biocentrismo. En 2009, fue co-autor de un libro "Biocentrismo: Cómo la vida y la conciencia son las claves para entender la verdadera naturaleza del Universo" con el astrónomo Bob Berman. En el biocentrismo, el espacio y el tiempo son formas de percepción sensorial de los animales, en lugar de los objetos físicos externos. Entender esto produce más plenamente respuestas a varios puzzles principales de la ciencia convencional, y ofrece una nueva forma de entender todo, desde el micromundo (por ejemplo, la razón del principio de incertidumbre de Heisenberg y el experimento de la doble rendija) a las fuerzas, constantes y leyes que conforman el Universo. El Premio Nobel Thomas E. Donnall declaró "Cualquier breve declaración no hace justicia a una obra tan erudita. La obra es una consideración académica de la ciencia y la filosofía que trae la biología en el papel central en la unificación de la totalidad ".

 

¿ES EL CRISTIANISMO UNA RELIGIÓN?

  La incompatibilidad entre fe cristiana y "religión" puede establecerse también basándose en el Nuevo Testamento.  San Pablo tuvo...